Conferencia de Isabelino Siede

 

 

Mi selección fué la conferencia de Isabelino Siede, 

 Quien menciona la gran importancia sobre las practicas docentes.  Invitando en este espacio, a reconocer e identificar qué es lo que realmente ocurre en las escuelas, cual es el accionar docente y como se desenvuelve, teniendo en cuenta los aportes teóricos que traen consigo y la historia académica con la que ingresan a la escuela.

Es interesante tener en cuenta que si bien, el docente pone en práctica sus conocimientos y enseñanzas dentro del aula, esta no deja de ser una práctica social, la cual preexiste en la escuela. En una sociedad, donde el traspaso de conocimientos es entre sujetos. Y este movimiento proviene desde antes que la escuela este.  

Luego de escuchar el fragmento que dice el autor “Somos lo que hacemos y somos el relato de lo que hacemos” me invita a reflexionar y reconocer, que las acciones que se ven reflejadas dentro del aula dicen mucho, pero que sin embargo hay detrás de todo aquello que se ve, lo que uno realmente es, sus esfuerzos, sus conocimientos, los progresos que incentivan a mejorar . Aquello que nos representa , son nuestras acciones, lo que hacemos identificándonos y dejando nuestra propia huella

Así también, otra definición que me atrajo fue “practica vertiginosa” creo que no hay mejor descripción, como lo dice. Al pasar tantas horas dentro del aula, detenerse y tomar un respiro, escuchando la palabra del otro, que quizás pueden ver que mediante nuestra tarea se nos pasa de largo o perdemos de vista, un propósito. Frenar un instante y ver el camino y el momento educativo que transitamos, nos invita al disfrute y a la reflexionar de generar nuevos interrogantes sobre nuestro deber.

Para concluir, es interesante como Isabelino da a conocer las cuestiones que pueden aparecer dentro de la institución y que están tan presentes en el rol docente y en la educación. Y por sobre todo la importancia y el espacio que le brinda a la enseñanza y aprendizaje, en donde el docente al enseñar brinde seguridad para que el otro ensaye, sin temor a la equivocación o a ser juzgado.